Las posibilidades de dialogo entre vecinos y las autoridades comunales parecen haber llegado a un punto muerto

Luego de varios días de protestas, los vecinos de Barrio Laprida, uno de los barrios más afectado por las últimas inundaciones, todavía no hayan el espacio que permita la apertura al dialogo con el actual intendente. Entre la negativa del mismo, primero, de acercarse al lugar del conflicto y la negativa, luego, de los vecinos de acceder a una reunión con sólo 10 a 15 de sus representantes, parecen haber llevado la situación a un punto estanco.

Así, pasadas las 14 hs. presos de la ofuscación, la ira y por momentos la desolación, ante un cielo  encapotado que les recordaba lo peor, los vecinos iniciaron el regreso a sus hogares luego del frustrado intento de que Martín Insaurralde reciba a todos los presentes en el Salón Mitre del edificio municipal. No sin antes votar en asamblea los pasos a seguir, entre los cuales adelantaron la intención de volver al corte de Camino negro en horas de la tarde.

Con este panorama estéril en medio del desastre y con la amenaza de nuevas lluvias podrán los vecinos reencausar la posibilidades de dialogo, retomar con mesura el espacio de la protesta que les permita acercar posiciones con las autoridades comunales; y, podrá de igual manera, la gestión del intendente M. Insaurralde buscar con responsabilidad y encontrar los caminos que permitan la apertura del dialogo?